martes, 13 de octubre de 2009

De CINICATOS y CÍNICOS

Bueno, por si no fuera poco escucharlo en la radio, verlo en tv y leerlo en internet, hoy me referiré al CINICATO Mexicano de Electricistas (SME).

Es bien sabido, y sobre todo por quienes vivimos en la zona centro del país, que el servicio de energía eléctrica es sumamente ineficiente y extremadamente caro. No hace falta indagar demasiado en nuestra memoria para encontrar un conocido, familiar o vecino que haya tenido que pagar varios miles de pesos a Luz y Fuerza del Centro sin saber siquiera por qué.

Cortes en el suministro eléctrico constantes, costos elevados e injustificados, pésima atención a clientes, son sólo la punta del iceberg en éste complejo asunto que tanta fuerza mediática ha ganado en días recientes.
Seguramente el movimiento de Martín Esparza (ex dirigente espurio del sindicato) seguirá siendo nota pues ya convocaron a marchas y plantones en la capital del país. Y era de esperarse ya que su más conocido aliado es AMLO quién encontró en éste asunto la manera de seguir actuando frente a las cámaras y no tardó en aconsejarle acerca de sus artimañas “políticas”: plantones, marchas, retos al presidente a debatir, descalificaciones e insultos a las instituciones, etc. Pero AMLO tiene, más allá de su anhelo por tumbar al presente gobierno federal otros intereses de fondo. Recientemente nos enteramos que ordeñaba dinero del programa de pensiones a adultos mayores  que él impulso cuando era Jefe Capitalino pues se inventó 400 000 nombres para mantener su “presidencia legitima” y todo el movimiento que dice tener. Pero la actual administración de Marcelo se lo ha quitado y no recibe más esos milloncitos junto con otros que recibía de supuestas obras en infraestructura. Resulta ser que el Sindicato de Electricistas también le inyectaba módicas cantidades mensualmente, en total hablamos de cientos de millones. Y no le agreguemos que la semana pasada atropelló a un campesino y éste murió, mientras “el legitimo”  regresaba de un mitin.

También, me vi muy sorprendido al leer la portada de “La Jornada” el fin de semana pasado, citaba: “El gobierno asalta instalaciones de LFC, ordena su extinción” HAZME EL CHINGADO FAVOR! ¿En qué momento hubo violencia, asalto? ¿Cómo se va a asaltar si no es una empresa ajena? ¿Qué no las instituciones son de la nación? (contrario a lo que afirma Martín Esparza cuando dice que lucharán por lo que es suyo hasta la muerte, sic!, me recuerda a AMLO contra la “privatización del petróleo”). Y menciono esto por qué viene aquí una molestia más para AMLO, La Jornada se ha caracterizado por ser su diario vocero y resulta que ésta, tenía como generoso aliado a Martín Espurio digo, Esparza. Se le va otra fuente de financiamiento a su ideología, a su movimiento.

Bien, pues esos gastos se pagaban directamente del subsidio que recibía LyFC. Directamente de los bolsillos de los contribuyentes es decir, de todos nosotros.

Pero ese movimiento, ya veremos en un futuro no muy lejano, no será más que dolores de cabeza en la ciudad por unas semanas y después perderá fuerza como siempre ha ocurrido. Sólo algunos medios lo seguirán magnificando, proyectando y haciendo creer a ilusos e inocentes “su verdad”.

También hay que agregar algo muy importante: Luz y Fuerza del Centro tenía el monopolio de distribuir y vender la energía eléctrica en el centro del país. Es decir sólo compraba y revendía esa energía eléctrica. La lógica indica que siendo monopolio y sin mayores presiones (ejemplo similar a Telmex) debería obtener ganancias multimillonarias. Contrariamente no tenía la capacidad para mantenerse por sí misma, había que inyectarle miles de millones de pesos anuales y sus servicios nunca fueron eficientes.  Pero había que pagar, sólo por mencionar algo, el sueldo de Esparza: cuyo sueldo debía ser de 12500 pesos por ser empleado, más 12500 por representación sindical, pero se agenciaba bonos por productividad, puntualidad, eficiencia, y otros discrecionales pues los sindicatos no están obligados a rendir cuentas a ninguna instancia, de tal forma que su sueldo real ascendía a 372mil pesos mensuales. Además el SME acumuló bienes como edificios, escuelas, gimnasios, centros vacacionales y de recreación y hasta una absolutamente innecesaria duela de bambú de cuyo tipo sólo existen en la NBA, etc. Todos ellos valuados en 18mil millones de pesos.

Quienes trabajaban ahí serán liquidados muy por encima a lo que estipula la ley y el 25% de ellos, serán re contratados para trabajar en CFE (de los 40mil empleados de LyFC sólo eran necesarios 10mil para su correcto funcionamiento) aparte de que, quienes así lo deseen, se impartirán cursos para iniciar sus propios negocios, etc.

Pero basta de cantidades, el punto es, La desaparición de LyFC significa un gran avance en materia económica, política y social. Que no nos engañen, ésta es probablemente,  la mejor decisión del gobierno de Calderón desde su inicio.

Ojalá sea sólo el inicio de una nueva postura ante los sindicatos que tanto frenan el crecimiento y competitividad de éste país (cómo el de maestros y el de Pemex), pues en caso contrario se puede pensar que el gobierno sólo elimina a quienes le causan problemas y, consciente a aquellos que le otorgan, indirectamente, votos o dinero.

MARCO ANTONIO SERRANO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario